Todo aquel que viva en Madrid sabe de la existencia de la catedral de la Almudena, situada en pleno centro de la capital.
Lo que ya no es tan generalizado es la aparición de diversas historias-leyendas sobre el estilo arquitectónico que podría haber tenido este templo, o curiosidades de su patrona, la Virgen de la Almudena.
La Almudena, ¿una catedral de fachada neogótica?
Observando el estilo arquitectónico de nuestra catedral, podemos concluir sin equivocarnos que es neoclásico. Pero esto podía haber sido diferente, ya que en un principio, cuando iba a ser construida se tenía la idea de edificarla con un exterior gótico. Al final no fue posible debido a los continuos retrasos en la construcción. Decidieron asemejar el exterior al estilo del Palacio Real, es decir, neoclásico.
Pero el interior sí que es de estilo neogótico, contrastando de manera curiosa las dos partes de un mismo edificio. Además de la catedral, existe una cripta que se hizo con el propósito de dar apoyo a este edificio de grandes dimensiones. Vale la pena visitarla.
Leyenda de la Virgen de la Almudena
Hay otra historia relacionada con la Almudena, pero esta vez con la virgen, no con la catedral en sí.
La figura de la Virgen de la Almudena, actual patrona de Madrid, ha tenido una vida muy ajetreada según cuenta la leyenda.
En el año 800, cuando los musulmanes conquistan la parte cristiana, en un pequeño pueblo se encontraba la Virgen de la Vega, muy adorada por sus habitantes. Al ver el avance musulmán, y por miedo a que profanaran la figura de esta virgen, la escondieron en lugar seguro.
La leyenda del escondite de la virgen fue contada de generación en generación, hasta que, tres siglos después, el rey Alfonso VI conquistó Madrid y volvió al cristianismo. Al oír la leyenda, el rey prometió que si conquistaba Toledo encontraría a la virgen y la pondría en su lugar de culto.
Efectivamente, el monarca conquistó Toledo y se puso manos a la obra en la búsqueda de la Virgen de la Vega. Tras numerosos esfuerzos sin ningún resultado, se organiza una plegaria que al anochecer tendrá su efecto según cuenta la leyenda.
Un hueco iluminado llama la atención de los soldados cuando ya es de noche, y ven con asombro que se trata de la virgen.
A partir de ese momento se llamará la Virgen de la Almudena, porque “Almudena” viene de almudín (al-mudy), que significa depósito de trigo, donde fue escondida y encontrada posteriormente.