La NASA anunció el descubrimiento de un nuevo anillo en Saturno, apenas perceptible entre algunos de sus aros más conocidos.
La nave espacial orbital Cassini captó el anillo y otras características extrañas cuando el sol pasaba directamente por detrás del planeta, fenómeno que se conoce como ocultación y que da a los anillos una iluminación brillante.
Las cámaras a bordo de la nave Cassini captaron imágenes de un material helado que se extiende decenas de miles de kilómetros desde Enceladus, otra confirmación de que la luna está lanzando material que podría formar un anillo exterior al E.
Saturno tiene al menos 47 lunas conocidas y siete anillos. La misión conjunta de la agencia espacial estadounidense y europea Cassini fue lanzada en 1997 y se ha pasado cuatro años examinando el planeta.
La nueva formación apenas se ve entre los principales y más brillantes anillos de Saturno y dentro del aro G y del E.
Esto coincide con las órbitas de las lunas Janus y Epimetheus de Saturno, y los investigadores de la NASA aseguraron que el impacto de meteoros en esas lunas ha hecho que otras partículas se unan al anillo.
“Tanto el nuevo anillo como las estructuras inesperadas del E nos dan una importante pista de cómo las lunas pueden lanzar pequeñas partículas y esculpir sus propios ambientes locales,” dijo Matt Hedman, un investigador asociado a la Universidad Cornell en Ithaca, Nueva York.
La nave también tomó una fotografía en color de la Tierra, a cerca de 1.500 millones de kilómetros de distancia, en la que parece una esfera azul claro.
“Nada tiene tanto poder para alterar nuestra perspectiva de nosotros mismos y de nuestro sitio en el cosmos como esas imágenes de la Tierra que obtenemos de sitios tan lejanos como Saturno,” dijo Carolyn Porco, responsable del grupo que ideó la nave Cassini en el Instituto de Ciencia Espacial de Boulder, en Colorado.